Manongo Mujica: “El ritmo es el elemento que une todo, toca una fibra en el ser humano, una fibra de unión. La fuerza de Perujazz es rítmica” | Cultural
“Tuvimos la visión hace más de 40 años de hacer un jazz con un sonido propio, que sonara a Perú, que no sonara a Estados Unidos, ni a Europa, que no sea una copia de copias, sino hacer un lenguaje propio y nuestro, que suene a festejo, a landó, a huayno, a fiesta de selva, a ayahuasca y al mismo tiempo a urbe, a ciudad, a sudor, a lo que significa sacarte la mierda para que realmente la música llegue a un alto nivel de expresión. Perujazz es una fusión de muchos elementos en donde el blues y el landó, el huayno y el funk, el festejo y el chamanismo y el humor van de la mano. Tuvimos ese elemento pionero de darnos cuenta de que somos una sociedad, pues, multiétnica, multifacética y que la música tiene de alguna manera que representar también esa peruanidad y esa ética, como tú dices, sigue presente, sigue siendo la dirección que hemos sostenido desde el inicio”, responde Manongo Mujica a la pregunta de La República: ¿la vigencia de Perujazz obedece a una ética?
Perujazz estará ofreciendo un concierto este sábado 6 de septiembre en El Dragón de Barranco (av. Nicolás de Piérola 168, Barranco), en donde la banda, fundada en 1984 por Manongo Mujica (batería), Jean Pierre Magnet (saxofón), Enrique Luna (bajo) y Julio “Chocolate” Algendones (percusión), estará, ahora con Mario Cuba (bajo, en reemplazo de Julio Zavala por este concierto), Pudy Ballumbrosio (percusión) y Andrés Prado (guitarra), celebrando con sus seguidores más de cuatro décadas de trayectoria en el marco del Festival Jazz Now.
En la poética musical de Perujazz hay una intensidad, una libertad, en especial durante las presentaciones, en las que vemos un despliegue de energía motivada por la improvisación, que es una de las características del jazz. Al respecto, el músico dice: “Como jazzistas, la improvisación es esencial. Los motivos melódicos, armónicos y rítmicos, si bien son estructuras muy fuertes que tenemos, en realidad son excusas; son medios para hacer variaciones en ese momento que te da la libertad de tocar realmente un poco lo desconocido. Acuérdate de que el jazz está sostenido en el ahora, en el momento, ahí está el reto de abrirte a esta música desconocida que surge en el momento. Después de nuestra gira europea en 2023, escuché todo el material y cada versión es única. Cada versión tiene solos que se dieron de una manera en Noruega, en Madrid. El zapateo de Pudy Ballumbrosio, por ejemplo, no es el mismo. Lo que hacemos es como un lenguaje del asombro, de la sorpresa, de abrirte al momento”.

1984. M. Mujica, Enrique Luna y Magnet. Falta Julio Algendones. Foto: Perujazz.
Cuando Perujazz apareció, y muy aparte de la resonancia musical, no pocos se preguntaron por las señas nominales, como jazz (que no es un género musical peruano). A estas alturas, no hay mucho que discutir sobre la naturaleza plástica del jazz, la cual permite fusionar o administrar distintos ritmos en una sola ejecución. Al respecto, Manongo Mujica cuenta la siguiente anécdota, que nos puede dar más luces sobre la naturaleza del nombre de la banda y su apuesta por el jazz. “Creo que fue en nuestra segunda gira europea. Teníamos una presentación en el Instituto Ítalo Latinoamericano en Roma y la directora de este instituto era una académica italiana que había hecho su maestría en la universidad sobre el imperio Inca. Ella nos convoca a Jean Pierre y a mí a su oficina y nos dice: “¿qué es esto de Perujazz? Esto es una contradicción. El Perú no tiene nada que ver con el jazz, yo he estudiado 20 años la cultura peruana. Yo sé más de Perú que todos los peruanos. Nunca he visto una referencia jazzística en la cultura peruana”. Y yo le dije: Tú eres una teórica del Perú, no has vivido en el Perú, pero si hubieras vivido en el Perú, te hubieras dado cuenta de que en verdad los peruanos somos grandes improvisadores. Todo el mundo informal peruano, que es el 70% de la población, vive improvisando. El genio del peruano es el emprendimiento. La creatividad de la población peruana no depende del Estado, ni de las leyes, ni de todas esas patrañas que nos cuentan para hacernos creer que somos civilizados. Eso es la estructura formal, la estructura de cartón. La verdadera vida del peruano está en cómo resuelve sus problemas en el día a día y eso es improvisar. Eso es una jam session, le dije. Y ella: “Es una buena respuesta, ahora comprendo”, dijo”.
Quienes hemos visto tocar a Perujazz, compartimos una impresión que va más allá de cuánto se conozca o no de jazz. Uno sale feliz y eufórico de sus conciertos. “Lo hemos visto en Europa. En Berlín, por ejemplo, tuvimos una audiencia de 500 jóvenes de pie, todos bailando. Nunca había visto una audiencia que bailara durante dos horas sin parar todo el repertorio de Perujazz. Cuando ves eso, dices caramba, sí estamos tocando una fibra que llega al corazón de la gente. Es un lenguaje muy directo. Creo que el secreto está en el ritmo. A veces no nos detenemos a pensar qué cosa es el ritmo. El ritmo está en la literatura, en la arquitectura, en la poesía, en las artes visuales, en la danza y en la música. El ritmo es el elemento que une todo, toca una fibra en el ser humano, una fibra de unión. La fuerza de Perujazz es rítmica”.
Como dice Manongo Mujica, el jazz toca una fibra de unión y, bajo este contexto político y social que atravesamos, esa fibra no es otra que la conexión con lo mejor que tiene Perú: su cultura. El músico es claro: “La política se ha vuelto en nuestro país un acto tan ególatra, tan corrupto, tan bajo, que no podemos mezclarlo con el arte. En eso tenemos que ser absolutamente radicales. Hay que sostener la visión de un arte que extrae lo mejor de la vibración de tu país y de tu alma, porque de lo contrario te dejas contaminar por algo que es denso y pesado, y que no amerita poner ahí nuestra atención y nuestra confianza, porque es un mundo podrido. Son realidades incompatibles”.
Fuente: La República